Los esfuerzos constantes resultaron en la incorporación progresiva de los presupuestos sensibles al género en el proceso de reforma presupuestaria de Marruecos. La experiencia de gestión de las finanzas públicas basada en los resultados y con sensibilidad de género durante más de 10 años en el país desembocó en la adopción, por parte de la Junta de Gobierno, de la nueva ley orgánica de finanzas, que institucionaliza jurídicamente la igualdad de género en todo el proceso presupuestario. Al dar un paso más en los procesos de presupuestos sensibles al género (PSG), la nueva legislación menciona explícitamente que la igualdad de género debe ser considerada al momento de definir los objetivos, resultados e indicadores de desempeño de los presupuestos sectoriales. La nueva ley orgánica además institucionaliza el Informe de Género como documento oficial de la Ley de Finanzas anual, lo que sin duda es un logro importante.
Anualmente, Marruecos produce un Informe de Género con información sobre el trabajo de cada sector desagregado por género (cuando los datos lo permiten) que se ha convertido en una importante herramienta de rendición de cuentas y supervisión que promueve los presupuestos sensibles al género de un año al otro. Para 2012, un total de 27 departamentos ya se habían sumado al informe, lo que representa más del 80% del presupuesto general del Estado. El informe logra exigir la elaboración de informes en los sectores más tradicionales (para los PSG), como salud y educación, así como en los menos tradicionales, como los ministerios de infraestructura y transporte.
El Departamento de Alfabetización lleva adelante ahora una planificación presupuestaria de sus programas en función de sus “destinatarios”, que son en su mayoría mujeres y que ahora constituyen el 85 por ciento de los beneficiarios de esos programas de alfabetización en Marruecos. Este enfoque, que comenzó en 2009, le permitió al Departamento una mejor adaptación a las necesidades de sus beneficiarios y beneficiarias. Como resultado, se están diseñando también diversos programas según los grupos etarios (15-24; 25-45 años y más de 45 años), así como la situación laboral (empleada/o o en busca de empleo).
Otro gran adelanto fue la inclusión de cláusulas en favor de la igualdad de género en la nueva Constitución del país de julio de 2011. El Artículo 19 consagra expresamente la igualdad de género en el disfrute de los derechos civiles, políticos, económicos, sociales, culturales y ambientales. La nueva Constitución también introduce el principio de igualdad de género mediante varios artículos que mencionan el compromiso de los gobiernos para trabajar por la creación de las condiciones que permitan el logro de la igualdad de género y la representación igualitaria de mujeres y hombres en todas las áreas y el acceso a los órganos de decisión.