TRANSPARENCIA Y RENDICIÓN DE CUENTAS

La promoción de la transparencia y la rendición de cuentas por parte de las instituciones públicas resultan vitales para la implementación eficaz de los compromisos con la igualdad de género.

Los sistemas gubernamentales enmarcan la relación entre estado y ciudadanía y, en ese sentido, reflejan las dinámicas sociales de poder. Determinan los parámetros de participación y expresión política de la ciudadanía en las decisiones que afectan su vida, lo cual se vincula con el acceso a los servicios, recursos y demandas de rendición de cuentas. La mayoría de las definiciones de buena gobernabilidad no hacen alusión explícita a la igualdad de género y se presume que los sistemas de gobierno son neutrales en materia de género. Desde una perspectiva de género y derechos humanos, la buena gobernabilidad debería cuantificarse según su contribución al fomento de los principios de derechos humanos y el logro de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres.

Al crecer los reclamos de transparencia fiscal y gobiernos abiertos, se ha dado un progreso considerable en cuanto a poner a disposición de la ciudadanía la información sobre las decisiones presupuestarias y, por tanto, a promover una mayor rendición de cuentas del estado a los ciudadanos. Sin embargo, se necesita una participación aún más inclusiva y sustancial, particularmente en cuanto a cómo se asignan los recursos públicos. Muy a menudo, los ministerios gubernamentales no pueden supervisar la idoneidad del gasto público para la igualdad de género. Algunas de las razones son la falta de: 1) capacidad para realizar análisis de género; 2) sistemas de seguimiento; y 3) suficientes datos desagregados por sexo.

ONU Mujeres presta apoyo a los países para construir e implementar sistemas de supervisión que examinen las asignaciones para la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres. Esto incluye iniciativas para elaborar indicadores de desempeño ciudadano y auditorías sociales, especialmente en el ámbito local, para aumentar la cantidad y calidad de los servicios básicos para mujeres y niñas.

Para aumentar la rendición de cuentas por la financiación para la igualdad de género es vital supervisar las asignaciones financieras y controlar cómo y dónde se emplearon. La organización de la sociedad civil AWID (Asociación para los Derechos de las Mujeres y el Desarrollo) trabajó en alianza con el Instituto del Tercer Mundo/Social Watch, economistas feministas, otras organizaciones por los derechos de las mujeres e institutos de investigación para crear un innovador indicador de desempeño, conocido como FundHer, para examinar la financiación aportada por los donantes y para abordar el panorama cambiante en la Cooperación para el Desarrollo.